Donald Trump anunció la destitución de la gobernadora de la Fed, Lisa Cook, acusándola de falsificar declaraciones hipotecarias, aunque la ley limita al presidente a remover a un gobernador solo “por causa”. Cook, designada por Biden en 2022, rechazó la medida, contrató al abogado Abbe Lowell y advirtió que Trump carece de autoridad legal. El caso podría terminar en la Corte Suprema y, de prosperar, daría a Trump mayoría en el directorio de la Fed. Analistas advierten que el intento representa una amenaza directa a la independencia del banco central. El DOJ investiga, pero Cook no enfrenta cargos. Los mercados reaccionaron con cautela: el índice dólar cayó 0,3%, el Treasury a 2 años bajó 4 puntos básicos y el oro subió 0,3%. El episodio añade incertidumbre en momentos en que Jerome Powell sugiere posibles recortes de tasas.
El secretario de Comercio, Howard Lutnick, indicó que la administración Trump considera adquirir participaciones en contratistas de defensa como Lockheed Martin, Boeing, RTX, Northrop Grumman y General Dynamics. El planteamiento surge tras la compra gubernamental de 10% de Intel por USD 9,000 millones. Lutnick destacó que Lockheed “es básicamente un brazo del gobierno” por su dependencia de contratos federales. La posible medida abriría debate sobre control estatal en sectores estratégicos. No se han definido montos ni plazos, pero podría alterar la estructura financiera de estas compañías. Lockheed lidera el mercado global de defensa por ingresos, lo que amplifica el alcance de esta estrategia. La mayor intervención gubernamental genera incertidumbre sobre el vínculo entre defensa y mercado de capitales.
Donald Trump amenazó con aranceles de 200% a China si limita exportaciones de imanes de tierras raras, insumo clave en sectores industriales de EE. UU. El mandatario advirtió que Boeing y sus piezas de avión son una herramienta de presión en las negociaciones. China controla 90% de la producción global y en junio sus envíos a EE. UU. repuntaron 660% tras el alivio de restricciones. Analistas en Pekín consideran que Trump exagera en su retórica pero busca avanzar hacia un acuerdo. Actualmente existe una tregua arancelaria con tasas reducidas de 55% y 32%, vigente hasta noviembre. El desenlace dependerá de nuevas conversaciones entre funcionarios chinos y estadounidenses. La incertidumbre añade presión a cadenas de suministro estratégicas.
Rusia expresó su interés en reactivar la empresa conjunta de producción de titanio con Boeing en la región de Sverdlovsk, suspendida desde 2022. El proyecto, que involucra a VSMPO-AVISMA, mayor productor ruso de titanio, fue detenido cuando Boeing dejó de comprar metal ruso tras la invasión de Ucrania. Moscú aclaró que nunca impuso restricciones a las exportaciones hacia EE. UU., lo que permite a las empresas estadounidenses seguir adquiriendo titanio ruso. La reanudación sería relevante para la cadena de suministro aeroespacial, donde el titanio es un insumo estratégico. Boeing depende del metal en la fabricación de aeronaves de fuselaje ancho y componentes críticos. La posible reapertura de la asociación plantea un dilema geopolítico, dado el contexto de sanciones occidentales.
IBM y AMD anunciaron una alianza para desarrollar “supercomputación cuántico-céntrica”, integrando ordenadores cuánticos con infraestructura de alto rendimiento y capacidades de inteligencia artificial. IBM presentó en junio su hoja de ruta hacia un computador cuántico de gran escala y tolerante a fallos antes de 2030, denominado IBM Starling, con un potencial de 20,000 veces más operaciones que los equipos actuales. AMD aporta su experiencia en CPUs y GPUs, esenciales para el modelo híbrido. En bolsa, IBM acumula un alza de 9% en 2025 y subía 0,8% en premarket, mientras AMD, con un avance de 35% en el año, repuntaba 2%. El anuncio refuerza la competencia tras avances de Google en 2024, que mostró un chip con capacidad teórica exponencial frente a supercomputadoras actuales.